Saturday, July 21, 2012

¿Jesús fue un monje budista?

Decir a los cristianos que Jesús no murió en la cruz y que al tercer día se reanimó y fue a vivir a la India, es decir una sarta de mentiras, más aún para los creyentes acérrimos, hablar de semejante cosa es una blasfemía.
Sin embargo, al ver dos documentales de la BBC de Londres, abordando el tema con una basta información, uno se queda con la duda o con la intención de conocer algo más al respecto. Eso es lo que trato de hacer en el presente artículo.
Sin duda, refutar lo que dicen los preceptos de la iglesia, con información de este tipo, abre un camino que bien podra servir para traer abajo una de las religiones con más seguidores en el mundo.
Es por eso que la iglesia Católica, en este caso, se ha cuidado de dar documentacion que podría refutar sus fundamentos.
Quizás, por esa razón también, la Iglesia Católica se ha opuesto a la exhibición abierta de la película 'Jesús de nuevo crucificado', historia basada en la novela del mismo título, escrita por Nikos Kazantzakis. Como recordarán la historia fue llevada al cine de manera magistral por el director estadounidense, Martin Scorcese. Es posible, que la misma razón -la negativa a tratar estos temas de manera transparente- hizo que la novela 'El codigo da Vinci' tuviera el éxito comercial que hasta hoy ostenta.
La iglesia tampoco ha dado fe a algunos libros encontrados en el medio oriente que dan cuenta del reencuentro y las palabras de Jesús después de su calvario en el Gólgota. Quizás muchos de ustedes han escuchado algo acerca del evángelio según San Tomás. En los evangelios se dice que Jesús habló con cuatro de sus discípulos y que entre ellos estaba María Magdalena. Cuando uno ve, lee o escucha las palabras de Jesús en el libro de Tomás, parece oír hablando a un monje budista quien da consejos a sus seguidores.
Me gusta, por ejemplo, uno cuando los discípulos preguntan.
¿Jesús dinos como es el reino de los cielos?
Y él contesta: 'El reino de los cielos es como una pequeña semilla de mostaza. Si esa semilla cae en tierra fértil, se convierte en un gran árbol que llega a ser luego el gran refugio de las aves del cielo.
O esta otra que dice 'que hay que buscar para encontrar. Quien toca (la puertta) tendrá el permiso de entrar.
Además, reconoce al hombre que tras haber sufrido encontrará la vida (la verdad, el amor, lo bueno).
Muchos de esos libros se han perdido o han sido destrozados para evitar -quizás- la duda que podría sembrar en una de las tradiciones religiosas más importantes del mundo.
Todo esto parece un triller, no se desconecten, por favor. Ya lo contó Irving Wallace es su novela titulada 'La palabra'. Buscar y conocer la verdad es lo que Jesús predicó. Y para quienes somos curiosos, siempre hay aspectos que se necesitan aclarar. No creo que se hayan perdido del todo algunos detalles de la vida de Jesús en sus primeros años. Hay que buscarlos. ¿Por qué no permitir que esa verdad se conozca. Es que refuta algo?
Si Jesús llegó a la India huyendo del poder romano dictatorial y asesino. La buena razón basta y sobra. ¿A dónde fue exactamente? ¿Por qué y con qué propósito? Lo que sabemos es que Jesús reapareció a los 29 años para -luego de ser bautizado- se dedicara a explicar aquello que aprendió.
No soy un conocedor de ese lado poco conocido de Jesús, pero lo que he oído me resulta interesante.
Voy a ubicarme en el momento de la crucificación. Jesús estuvo en la cruz seis horas y luego murió. El castigo que se daba a quienes se crucificaba era brutal. No sólo se los clavaba en la cruz, también se les rompía las piernas con el propósito de atormentarlos. Era una de las maneras de provocar la sofocacion y por consiguiente la muerte. Sin poder mantenerse en pie, la respiración se hace imposible. Todos sabemos que Jesús pidió agua para beber en la cruz, entonces se le dió vinagre.
El que lo hizo sabía algo más, a decir de quienes tratan de probar una teoría. En el vinagre se le dió a Jesús algún tipo de sustancia para cedarlo o hacer menos doloroso su padecer. Es posible, ademas, que se pretendiera evitar aquello que suponía romperle las piernas. Cuando los soldados comprobaron que Jesús ya había fallecido, no hicieron aquello que ya habían hecho con quienes acompañaban a Jesús en el calvario. Por lo tanto, los soldados no llegaron a masacrar a Jesús en la cruz, sin olvidar claro todo el martirio por el que le hicieron pasar. Las autoridades no confiaban en la muerte de Jesús y esperaron, le hundieron una lanza en las costillas, hasta que lo bajaron y sepultaron en un lugar que pertenecía entonces a un rico de la zona.
Aquí hay una teoría muy interesante. Siendo el cristianismo una fuerza que empezaba a crecer, algunos intereses se ponían también en juego. Los conspiradores buenos que evitaban que Jesús muriera habían tramado salvarlo. Quienes no sabían nada al respecto se sorprendieron cuando vieron a Jesús con vida y exigieron pruebas de que él era el mismo del calvario. El asunto no termina ahí, con la reaparición de Jesús se presentaba, además, un problema político y había que crear un mito importante, vital para el cristianismo. Es por eso que se eligió la ascension, decir que Jesús se había ido a reunir con su padre, era irrefutable.
Hoy las investigaciones dicen algo más, Jesús no ascendió a los cielos, sino que tomó el camino contrario al de los territorios controlados por los romanos, burló el control y llegó a la India. (Hay algunos que tratan de crear una nueva teoria, 'El codigo Da Vinci' lo dice de alguna manera. Hay algunos que comentan que María Magdalena, su hermano Lázaro y su comitiva llegó al sur de Francia, entre ellos iba de incognito Jesús de Nazareth).
Sin embargo, en Cachemira hay un lugar donde se dice que Jesús pasó sus últimos años. Vivió hasta los 150 años. Hoy incluso, se puede ver su tumba donde yacen sus restos. Antes se hacía lo mismo de hoy, imprimir las huellas de quienes han logrado algo. En la época de Jesús se imprimió sus pies en metal y hay comprobaciones de detalles que dan cuenta de los clavos que se clavaron en los pies cuando fue crucificado. En dicha zona de Cachemira se conoció a Jesús como Issa y su historia se relata en los textos antiguos escritos en la lengua nativa. El escritor ruso Nicolás Notovitch hizo traducir todo lo referente a Jesús y luego publicó su novela titulada 'La vida desconocida de Jesucristo'.
En la zona de Cachemira se instalaron también los judíos y a esta etnia pertenecía Jesús. Se le conocía como el profeta hebreo. Cuando nació, siguiendo la tradición budista de encontrar al nuevo Lama, se envió a los tres sabios -conocidos como los reyes magos- a reconocer a Jesús.
Jesús volvió a sus raíces. Mientras tanto, el grupo romano cristiano, vale decir el más pudiente y con poder político comenzó a tomar el control de toda la doctrina. Bajo sus preceptos se erigió, entonces, los cimientos de la iglesia Católica como la conocemos hoy, con sus cismas conocidos, claro está. La religión o la creencia se convirtió por lo tanto en un asunto político. El propio Jesús, tal vez, discrepó con todo esto, es más, él confiaba en el papel más protagónico de las mujeres. Hay que recordar que hay algunas versiones bien documentadas que dan cuenta que María Magdalena se convirtió en una de sus mejores discípulas y hay incluso la versión que da cuenta de un matrimonio entre ambos.
Sin duda, la historia es de novela.

Thursday, July 19, 2012

Iluminado en la oscuridad.



No había visto nada de su trabajo. Oí algo acerca de Michael Naranjo cuando estaba leyendo un libro titulado 'Patiente, the art of peaceful living'. Me sorprendió tanto saber que existiera un artista como él, así que corrí a Youtube tratando de encontrar y ver su trabajo. Y precisamente en Internet encontré un documental de alrededor de 30 minutos realizado por PBS.
Cada vez que me siento algo desmoralizado, pensando que no voy a lograr lo que me he propuesto hacer, corro a Youtube y busco el especial dedicado a este nativo americano Tewa. Es más, el documental se los he recomendado a mi hermano artista, a mis sobrinos y algunos amigos. Mi propósito ahora es compartirlo con ustedes para que cuando digan 'No puedo' una voz interna responda 'Si puedes, no jodas, mira el trabajo de Michael Naranjo'
Sin más preámbulos, Naranjo es un excelente escultor ciego. Sus obras se pueden ver en muchos museos de los Estados Unidos y en algunas partes del mundo, entre ellos en el Vaticano.
Naranjo resultó ciego despues de permanecer seis semanas en Vietnam. Cayó en una celada y una granada hizo que perdiera la visión.
“Jamás olvidaré aquel día, 8 de enero de 1968”, recuerda. “Miré directo a los ojos del soldado vietnamita, quien lanzó la granada, La explosión no sólo afectó mis ojos, sino también daño mi mano derecha. En aquel momento pensé: Dios mio, que esto no sea muy duro para mis padres”. Luego creyó que moría, hasta que escuchó. 'Estas bien, baby'. Era el sargento de su pelotón quien le daba ánimos.
Rescatado por el sargento, Naranjo fue trasladado en un helicóptero fuera del escenario de batalla donde se desató una feroz balacera. Perdió el conocimiento y cuando despertó estaba en una sala del hospital de Saigón, donde comenzó su terapia de rehabilitación. El pensó entonces que su sueño de ser escultor se hacía añicos.
Fue en un hospital de Japón donde Naranjo empezó su verdadero trabajo de recuperación. Al principio pensó que iba a terminar loco, junto a él, en aquel pabellón, estaban muchos heridos mutilados que tenían que enfrentar la nueva lamentable realidad así como un futuro incierto.
Naranjo recuerda que comenzó a envidiar a las aves, que podían ver. Hasta que un día pidió un pedazo de arcilla y comenzó a hacer lo que sabía. Su familia, incluída su madre Rose, eran aclamados ceramistas.
Con la arcilla hizo una cabeza, con sus ojos y su boca, entonces supo que podía esculpir. Luego hizo un pescadito, siguió la figura de un pensador y luego una ardilla con su semilla en la boca.
Cuando volvió a los Estados Unidos y mientras continuaba su recuperación en Denver, ocurrió algo sorprendente. Naranjo había hecho un indio a caballo, alguien tomó una foto y la envió a un diario local. Sabiendo de su ceguera, los lectores comenzaron a enviar cartas diciendo que sí el artista hacía otro trabajo, ellos desearían comprarlo. Michael destruyó la pieza que logró e hizo un oso con un pescado en la boca.
Sus mejores piezas nunca han sido vendidas.
Hoy Naranjo no tiene tiempo para lamentarse, pues se dedica a trabajar. Sólo se da cuenta de su ceguera cuando deja la piedra que está esculpiendo. “cuando me golpeo con algo al caminar, me doy cuenta que no puedo ver”, comenta. “Es sorprendente como puedo ver con la punta de mis dedos”, dice risueño.
Los años de la guerra y el mal recuerdo de lo que ocurrió se han ido. Aunque Naranjo no olvida lo que hizo, “para sobrevivir, tú tienes que remover todas las buenas emociones dentro de ti”. “Cuando me encontré con un viejo vietnamita, sentado en una mesa, me ofreció una taza de té. El tomó la taza y me la ofreció con buenas maneras. Yo estaba parado junto al viejo con mi M16 apuntándolo. Sonriente seguía ofreciéndome el té. Lo miré y le dije 'bebelo tú' y él tomó. Luego volvió a servir té y me lo ofreció de nuevo. Lo miré y moví la cabeza diciéndole 'no'. Volteé y caminé lejos de ahí. Entonces pensé: Oh, Señor, ¿qué me está pasando, cómo puedo hacer todo esto a un ser humano? En ese momento la guerra me habia cambiado”.
Lejos de Vietnam, Naranjo tuvo un sueño que se cumplió en Roma, junto al papa Juan Pablo II. Estando en el Vaticano se le permitió tocar al inmenso Moisés de Miguel Angel. Naranjo se pasó más de dos horas junto a la majestuosa estatua, toco cada detalle del trabajo del genio italiano.
Hizo lo mismo con el David, cuando visitó Florencia. Dice que cuando supo que eso ocurriría comenzó a llorar de alegría. Comenta que al tocar esos labios suaves del joven David creyó oír la voz contenida del personaje. Pudo sentir, además, la tensión en el brazo donde David sostiene la honda y la piedra que iba a lanzar contra Goliat.
La vida de Naranjo no es fácil, debió aprender primero a ser paciente y gracias a su esposa que le entiende a la perfección ha podido dominar esos malos momentos. Laurie sabe que cuando me despierto de mal humor, ella toma mi mano y me dice que me vuelva a mi cama. Ahí me doy la vuelta y me pongo en pie por el otro lado. Entonces rio. Así es como peleo y le gano a la impaciencia.
Junto a Laurie, Michael tiene dos hijas. Ellos viven en una casa diseñada por el artista, quien además creo la fundación de Arte que permite a los visitantes tocar las esculturas que se exhiben en la comunidad de Santa Fe, Nuevo Mexico.

Excusas extraliterarias


Tengo una excusa perfecta para no escribir, estoy leyendo y releyendo algunos libros que me permitirán contarles algo interesante, pero para ser exacto, no sólo son libros los que estoy leyendo, estoy leyendo también revistas, entre las que destaca The Writer.
Me lamento de no contar con la membresía que me permita leer la revista cada principio de semana de cada mes. Hoy al leer la revista pienso que he perdido algo. Ese algo importante para mi, algo que disparaba mis ideas creativas en varias direcciones.
Acabo de leer y traducir una idea expresada por el escritor T. C. Boyle, por ejemplo, quien dice que “la ficción es arte, es seducción, es disfrutar y entretener. No escribo para hacer puntos, escribo para explorar cosas, temas, posiciones, misterios que me intrigan o me dejan perplejo”.
Le preguntan al autor de 'Wild animal', ¿tu trabajo es muy dramático y también muy interior, cómo satisfaces ambas necesidades de ficción en tus novelas?
Boyle responde, “realmente no lo sé, hay una voz que controla en toda narración, no importa cuan íntimo sea el punto de vista o sí narro en primera o tercera persona, pero debo admitir esa voz. El truco esta en hacer que el lector olvide la voz que controla y seduce desde el punto de vista de un personaje. Esto es lo que intriga y a la vez divierte. Es como hacer crecer una burbuja, una y otra vez”.
Boyle siempre se ha intersado por figuras históricas que han usado mal la cabeza. Entre sus personajes figuran Mungo Park, Alfred Kinsey, Stanle McCormick, entre otros.
Leyendo la revista puedo acceder también a algunos consejos que son vitales al momento de escribir. “Escribir es algo así como iniciar una dieta, se necesita disciplina, algún tipo de plan. Hay que renunciar a algo para encontrar el tiempo que se necesita para escribir, quizás dormir menos, no contestar el teléfono, aunque tus amigos te llamen un antisocial y olvidar mirar las series de televisión que más te gustan”
No es por nada pero hace algunos meses que tengo el televisor desconectado del cable que me da acceso a algunos canales interesantes, como Discovery Channel, History Channel, entre otros.
Muchos dicen que ando desconectado de la realidad. Vaya, la realidad se torna difícil por ratos. Hace algunos días atrás un peruano muy tranquilo a quien conocí en vida, le pegó un tiro a su esposa y luego apuntó el arma contra sí mismo y se quitó la vida. Las pasiones humanas desmedidas. Quizás lo ocurrido me ayude a escribir un cuento que anda dando vueltas en mi cabeza, donde tres personas se enfrentan en un triángulo amoroso, dos son jóvenes y un viejo. No sé si seré el testigo del asunto o el involucrado, Todo comienza una fría noche de invierno, cuando salgo del bar a fumar un cigarrillo. Algo inusual ocurre ante mis ojos, un joven está detrás de un auto, mirando como una muchacha baja de un carro deportivo, justo en el momento en que el viejo la manosea a su antojo, la joven ríe con descaro. Al parecer es la novia en disputa. Cuando el mozuelo es descubierto, ella se sorprende y trata de explicar que esta con un amigo. ¿Un amigo que tiene acceso a tocar descaradamente sin recibir siquiera una protesta?. Son apenas unos muchachos inexpertos que enfrentarán a un viejo. ¿Es el viejo un depravado? ¿Es eso lo que le gusta a la joven?
Veremos que sale.
Internet es el medio que me conecta con el mundo, pero ahí también todo me lleva a la literatura. Acabo de leer la sección cultural del diario El País y me he dado con la opinión de seis escritores españoles en torno al trabajo de extinto escritor estadounidense, William Faulkner. Cada uno destaca algún lado oscuro de las novelas, la atmósfera imperante, los personajes predestinados a lo peor, las mujeres y su papel seductor y fatal, la historia que viene anclada desde el pasado y por cierto el estilo desbordante, casi que ahoga porque no sabremos si habrá mañana. Y no se imaginan las ganas que tengo de volver a leer “Luz de agosto”.
Y si de releer se trata, les diré que estoy atrapado otra vez en la novela HHhH de Laurent Binet, quien como saben cuenta la acción valiente de algunos miembros de la resistencia checa para acabar con la vida de feo caballo ario conocido como el 'carnicero de Praga', Reinhard Heydrich, a quien se le conocía como la cabeza de Himmler, de ahí las iniciales del título de la novela. Esta segunda lectura me esta sirviendo para desatar los nudos de construcción de la historia contada de manera inteligente y novedosa por Binet. Ando en la parte en que los dos paracaidistas -checo y eslovaco- han sido lanzados muy lejos del punto convenido y para su buena suerte han sido hallados por un compatriota que decide ayudarlos. Ya los nazis se han lanzado también en cacería, pues han escuchado sobrevolar el avión que trajo a los valientes soldados que tienen la difícil misión de acabar con el bastardo intruso, a costa de su propia vida.
Un libro es un viaje (siguen los consejos). Si no terminas de leer no has completado el viaje.
Dejar de escribir es perder la oportunidad de conocernos mejor, Uno no escribe para sorprender a los conocidos, cuando uno escribe tiene que explorar eso que tiene dentro.
Escribir bien es la forma más dura de pensar.
Leer ahora se ha convertido en una excusa para no escribir. Leer es lo mejor de mi autoexilio y como sé que es una forma de autodisciplinarme, lo hago con fruición.
Cuando leo soy exigente, deseo entrar en el corazón del escritor, quiero la poesía, al música, la perfección, la comida que me haga olvidar que debo almorzar o cenar. Enganchado en ese mundo mágico, me pregunto ¿qué puedo tomar de este trabajo maravilloso? ¿cómo ingerir toda esta vitamina para nutrir mis sueños, mis pensamientos, mi propio acto de escribir?
¿Qué es lo que hizo este escritor que yo no pueda hacer? Un escritor debe luchar con todos los misterios y las cosas extrañas de la vida. Una historia debe mover los conchos y debe hacer que te levantes de la silla donde estas leyendo con la fuerza de un león.
Todo eso se logra, palabra tras palabra. El lenguaje debe convertirse en la antorcha que ilumina el laberinto. Hay que ingresar al laberinto para alcanzar nuestra verdadera identidad. Escribir una historia es como llegar a rozar el altar divino, es palpar nuestra propia creación. Si Dios te dio la posibilidad de mirar con profundidad dentro de ti, debes tener el coraje para hacerlo. No hay excusas contra eso. Hay que terminar con la cobardía y animarse con valentía a realizar el viaje.